Momentos de descanso |
Este Lunes me he dirigiodo hasta el coto de León acompañado esta vez por Diego y Chema (su primera vez) con la intención de dar una manita a las esquivas perdices y de paso ver alguna zona de roble que tiene el coto por si hubiese alguna arcea ya que por Asturias están más que contadas. El dia se presentaba bien, frio pero despejado y empezamos dando una mano a las perdices que pronto se dejaron ver ya que no llevariamos ni 10 minutos subiendo una ladera cuando Noa me puso un par de ellas que se me volaron algo largas pero a tiro, pero los tiros no fueron acertados y se me fueron con más vida de la que tenian. Como media hora despues Diego y Chema conseguian dar con un bando de unas doce perdices que se les volaron fuera de tiro y como cinco minutos más tarde yo doy con otro bando de unas siete perdices a las cuales les mando un par de regalitos en forma de perdigones pero nada acertados ya que no consigo bajar ninguna (estoy en racha jejejeje). Entonces decidimos ir en busca de los dos bandos cada uno por su lado para ver si hay suerte, pero al rato nos encontramos sin haber tenido suerte y despues de un pequeño descanso decidimos buscarlas en otra dirección y en medio de esa busqueda saltó la sorpresa del dia, hecho en falta al Arón desde hace un rato y decido echar un vistazo a un pequeño reguero que hay entre dos laderas de escobas que estaba mirando y hay está el pobre, debajo de un unico arbol seco que habia al final del reguero, en muestra como una estatua, el lugar me hace pensar que no pueden ser las perdices y decido cambiar la munición de la escopeta por un diez especial becada por si acaso, despues de un rato decido tirar una piedra pero no sale nada, tiro otra piedra y sigue sin salir nada entonces mando al perro entrar y... lo que esperaba bota una arcea como un avion justo por detras del arbol seco y con un poco de suerte consigo abatirla de un tiro un poco tapado pero efectivo, luego un cobro de Arón perfecto y arcea para el chaleco. Despues nos pasamos horas sin ver nada de nada hasta que Chema consiguio levantar uno de los bandos otra vez pero sin suerte en los tiros, entonces empezamos otra vez la rebusca y conseguimos dar con ellas despues de una muestra de Noa y Arón pero salieron un poco largas y ni los tiros de Diego, ni de Chema ni los mios consiguieron hacer diana (no era nuestro dia con las perdices). Decidimos entonces dar una mano a las arceas y nos bajamos para una zona donde siempre solemos ver alguna y efectivamente dimos con una pero de las que se dejan ver más bien poco y despues de tres levantes sin conseguir verla al cuarto la bretona de Chema la pone pero falla el primer tiro y el segundo se le encasquilla la escopeta y se nos va, despues otro levante pero se fue y luego ni rastro por lo que decidimos dejarlo e irnos para el coche ya que era una hora prudente (16:30) y todavia quedaba el viaje de vuelta.
Resultado |
Noa en muestra |